domingo, 31 de enero de 2010
(Más de 100.000 refugiados de Sahara Occidental esperan.)
sábado, 23 de enero de 2010
- Por fin aparezco; como soy el que hace las fotos no suelo quedar inmortalizado, pero tengo a Nguia de ayudante porque a ella la encanta coger la cámara.
- A la izquierda Sanadi hermano mayor de Nguia, trabaja como locutor y presentador en la radio-televisión saharaui en Rabuni. Aunque por causas del trabajo no pudimos estar juntos el tiempo deseado, nos compenetramos muy bien.
- A la derecha Lela uno de los hermanos de Minetu, trabaja como fisioterapeuta en uno de los dos hospitales que existen en todas las wilayas o provincias que hay en los campamentos de refugiados(si se les puede llamar hospitales). Habla perfectamente el castellano, estuvo estudiando siete años en Cuba y tiene una mentalidad muy abierta. Fue con la persona que más tiempo pasé allí y entablamos una gran amistad.
- Bakai es el padre de Nguia. Muy amable y agradecido, pudimos hablar largo y tendido durante mi estancia en su casa, continuamente preocupado por mi bienestar facilitándome cualquier cosa que le sugería; contestándome siempre "no hay problema ,tranquilo, se va a solucionar". Es el alcalde de una daira o pueblo llamado Bucraa. Muy trabajador y activo, preocupado siempre por toda su gente.
martes, 12 de enero de 2010
Campamentos de refugiados Saharauis en Tinduf (Argelia) - 04 al 10 de Diciembre de 2009
DESPERTARES
Quisiera hacer una reflexión sobre la reafirmación de la persona y por eso escribo, es un ejercicio que aconsejo a todos:
Me olvido con facilidad de quién soy, de dónde vengo y a dónde voy; es la eterna trilogía abstracta del existencialismo, en la que la variable fundamental es la unidad de tiempo (hoy, ayer y mañana), sí, el segundo. Esa pequeña y leve ausencia del presente, prácticamente insignificante, pero así son las pequeñas grandes cosas, las que sin valor aparente despreciamos como si no tuvieran importancia.
Estas pequeñas dimensiones que nacen y mueren correlativamente, que se van sucediendo en el tiempo, que ya no volverán ; son esos diminutos momentos que ya no podremos corregir, que añoraremos sin más compañía que la tristeza por no poder cambiar el curso del tiempo, sin tener la posibilidad de utilizar esa varita mágica gracias a la cual, con nuestra fantasía, sobrevivimos años atrás.
Fueron pequeñas grandes cosas las que dejamos escapar, a las que no dimos importancia, las que por no hacer un pequeño esfuerzo dejamos que se desvanecieran, las que ahora me hacen preguntarme ¿Qué hubiera pasado de aquello que sin tener que pasar, pasó?¿Que pasó? ¿Por qué lo dejé pasar? ¿Por qué pasa lo que pasa?¿Por qué pasamos?. Aún hay tiempo, la vida es el tiempo de la cuenta atrás, siempre mirando hacia delante podremos alcanzar ese gran final que son las pequeñas e instantáneas felicidades que ganamos en el camino.
Imagino que a todos nos llega el momento de plantearnos estas cuestiones, y éste es mi tiempo en el que me toca intentar responder, desde mi más insignificante, pequeña y humilde opinión. Quisiera hacer un llamamiento para recuperar esas pequeñas cosas antes de que se pierdan, antes de que sean irrecuperables, antes de que no tengan remedio; me refiero a ese futuro que está por llegar, a este segundo que ya ha llegado y se ha vuelto a ir.
Somos islas dentro de un continente, gotas de agua sobre un volcán, granos de arena flotando en el mar, burbujas de aire en desmesurada polución. Somos momentos vivos en espera de perecer y momentos que suceden en este estrecho espacio de tiempo en el que posiblemente no nos recordaran; y por eso mismo, como isla solitaria, gota de agua estancada en un charco, grano de arena posada en el fondo del mar y burbuja de aire sumergida en nubes de contaminación que soy. Me niego a seguir estando solo entre tantos continentes, a ser gota de agua que escapa de un grifo abierto entre tantos ríos, lagos y mares, a ser grano de arena perdida en el desierto entre tanto monte y montaña, y a ser molécula de aire prisionero en mi burbuja contaminada entre océanos de aire puro. Me niego, me niego, me niego.
Es hora de que despertemos de esta larga hibernación, anestesia y adormilamiento en el que, en general, nos encontramos inmersos; en el interior de una nube que no nos deja ver ni sentir más allá de nuestra propia vanidad. Nuestro ombligo es el eje central de esta ignorancia que nos ciega y nos convierte en personas vulnerables y débiles ante esta sociedad que nos engulle sin miramientos, nos devora sin preguntar, nos manipula como títeres y nos anula como personas.
Es hora de levantarse del sofá, de dejar de buscar entretenimientos que sólo me entretienen, de vivir la vida real sin buscarla en la televisión, de compartir mi tiempo con el mundo, de buscar espacios abiertos y salir de mis cuatro paredes, de empezar a romper muros que me impiden ver más allá.
Es hora de abrazar, amar, besar, sentir, gozar, dar, entregar, ofrecer, adorar, apreciar, considerar, estimar, respetar, valorar, enamorar, cortejar, requerir y querer.
¡Actívate! ¡Remuévete! ¡Moléstate! ¡Movilízate! ¡Incomódate! ¡Preocúpate! ¡Enfádate! ¡Asóciate! ¡Manifiéstate! ¡Involúcrate! ¡Entrégate! ¡Niégate! Y sobre todo ¡Reafírmate!
“EL MUNDO TE LO AGRADECERÁ”
¡¡¡ SALUD, AMOR, Y LIBERTAD!!!